Teoría de la Decisión Multicriterio: un Ejemplo de Revolución Científica Kuhniana

Los problemas más complejos son, en bastantes ocasiones, aquellos que aparentemente tienen una solución más directa y sencilla. Así, si nos preguntamos por el propósito de la Teoría de la Decisión y la caracterización de su objeto de estudio, diríamos que son aquellos procesos que consisten “simplemente” en la elección por parte de un centro decisor (un individuo o un grupo de individuos) de lo “mejor” entre “lo posible” . El estudio del correspondiente proceso de elección puede realizarse por motivos distintos tales como: a) explicar el comportamiento real de los centros decisores (enfoque positivo o descriptivo), b) explicar cómo deberían comportarse los centros decisores, para que su conducta se ajuste a una serie de normas o axiomas que se consideran caracterizan la racionalidad (enfoque normativo) y c) ayudar al centro decisor a tomar la mejor decisión posible de cara a sus intereses particulares (enfoque prescriptivo). Ahora bien, sea cual sea el propósito perseguido, la Teoría de la Decisión pretende “simplemente” proporcionar marcos analíticos que permitan elegir “lo mejor” dentro de “lo posible” . Sin embargo, este, aparentemente, sencillo propósito, a la hora de hacerlo operativo, implica en muchos casos importantes complejidades analíticas. Pasamos a comentar brevemente cómo se ha abordado tradicionalmente el problema de determinar “lo posible” , así como “lo mejor” . En cualquier problema de toma de decisión existen recursos limitados (la idea económica de “escasez” ), que generan las restricciones del problema. Aquel o aquellos vectores de las variables de decisión que satisfagan el conjunto de restricciones del problema decisional, constituyen el conjunto factible o alcanzable, y formaliza lo que intuitivamente entendemos por “lo posible” . Este conjunto factible puede tener diferentes estructuras matemáticas (conjunto de igualdades y/o desigualdades, politopo convexo, restricciones lógicas, etc.).